Una función fundamental del Instituto Nacional de Antropología e Historia es su labor académica, que realizan más de 400 académicos adscritos a las disciplinas de historia, antropología social, antropología física, arqueología, lingüística, etnohistoria, etnología, arquitectura, conservación del patrimonio, conservación y restauración. Hay también proyectos académicos sobre temas diversos, que forman parte de la labor de investigación que se realiza en el Instituto.
El Instituto cuenta también con planteles educativos y un equipo docente de reconocido prestigio a nivel mundial, en la enseñanza y especialización en antropología, arqueología, museografía, museología, restauración y conservación del patrimonio cultural. Asimismo, participa en el desarrollo de planes y programas de estudio en otras instituciones académicas, como la Escuela de Conservación y Restauración de Occidente, localizada en Guadalajara, Jalisco. Te invitamos a que conozcas los planteles del INAH.
La custodia y preservación de acervos documentales para la consulta pública es otra función del INAH, para lo cual cuenta con la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia (BNAH), y la Biblioteca Manuel Orozco y Berra. La BNAH reúne la mayor colección de publicaciones de carácter histórico y antropológico en México, al mismo tiempo que resguarda fondos documentales y códices de importancia histórica, que la Biblioteca Manuel Orozco y Berra custodia un acervo especializado en la Historia de México y colecciones de ciencias sociales a la vez literatura mexicana.
Definiciones técnicas
Conservación. Conjunto de operaciones interdisciplinarias que tienen por objeto evitar el deterioro del patrimonio cultural tangible y garantizar su salvaguarda para transmitirlos a las generaciones futuras con toda la riqueza de su autenticidad. La conservación se integra con acciones preventivas, curativas y de restauración.
Protección. Conjunto de acciones académicas, técnicas y legales que promueven la investigación, identificación (inventarios, catálogos y registros), conservación, resguardo, recuperación y difusión de los bienes culturales monumentales.
Mantenimiento. Conjunto de operaciones permanentes que permiten conservar la consistencia física de los bienes culturales, evitando que las agresiones antropogénicas, físicas, químicas y/o biológicas, aumenten su magnitud en demérito del patrimonio cultural.
Restauración. Conjunto de operaciones programas que actúan directamente sobre el bien. Estas actividades se aplican cuando el patrimonio ha perdido parte de su significado o características originales y se interviene de manera científica y rigurosa para transmitirlo a las generaciones futuras con toda la riqueza de su autenticidad. La restauración es la actividad extrema de la conservación.