Relevancia cultural
La ciudad de Texcoco fue la cabecera del reino del Acolhuacan y era una de las entidades políticas de la Triple Alianza (México -Tenochtitlán, Texcoco y Tlacopan). Según algunas fuentes históricas (Fernando de Alva, Ixtlilxóchitl. Obras Históricas, 1977, Fray Toribio de Benavente, más conocido como Motolinía. Historia de las Indias de la Nueva España, 2003; Memoriales, 1903; el Códice Xólotl), el Acolhuacan se formó tras la fusión cultural de dos grupos étnicos: los chichimecas y los acolhuas. El Acolhuacan central o nuclear abarcaba desde Chimalhuacán y Coatepec por el sur, hasta Chiconautla al norte.
De acuerdo con las crónicas antes mencionadas, 14 centros de población dependían de Texcoco: Huexotla, Otompan, Teotihuacán, Acolman, Tepechpan, Chiconauhtlan, Chimalhuacán, Tezoyucan, Xicotepec, Chiauhtla, Cuauhchinco, Tollantzinco, Coatlinchan y Tepetlaoztoc.
El Acolhuacan tiene un origen común como grupo migrante chichimeca que adquirió el linaje de Xólotl y se fusionó a remanentes toltecas. El primer grupo de gobernantes del Acolhuacan, según las fuentes históricas, estuvo conformado por Xólotl, Nopaltzin, Tlotzin y Quinantzin, los cuales poseían un linaje chichimeca.
Posteriormente reinan Techotlalatzin, Ixtlilxóchitl, el famoso rey Nezahualcóyotl, Nezahualpilli y Cacamatzin, al que le toca la llegada de los españoles.