Un beso enmarca la recta final de la 34 FILAH
Un joven con cuernos de venado baila al ritmo de los tambores, un maestro enseña a forjar una pieza prehispánica, la soprano Aurora Sanz erizándonos la piel con su voz, los estudiantes de la ENAH mostrando una casi monumental portada de semillas, cuatro mujeres ejecutando la danza yoruba, el Trío Guajiro haciendo que todos cantáramos Guantanamera, chicas comcáac pintando el rostro de otras jóvenes a quienes les explican el significado ancestral de las líneas y colores, presentaciones de libros y más libros autoría de hombres y mujeres que han dedicado su vida a la investigación, niños y niñas alegres con máscaras de fariseos yaquis, el coloquio de Africanías que vino a decirnos que los mexicanos tenemos más de dos raíces, rostros cansados pero alegres de compañeros del INAH que no han parado para que todo salga lo mejor posible en la feria, Simpson Ahuevo recordándonos a los del centro del país que el norte también es México, la venta nocturna de libros, unos novios dándose un beso en la fuente del Paraguas porque... también la 34 FILAH puede ser una buena cita.