Museo Regional de Querétaro: custodio y protagonista de la riqueza cultural queretana
El edificio que actualmente ocupa fue en sus orígenes el convento Franciscano de Santiago, el cual, desde sus inicios, en el siglo XVI, representó el centro rector de la vida social de Querétaro, así como el eje articulador del espacio urbano. Este recinto constituyó un enorme complejo religioso que atendía una diversidad de funciones vinculadas a la vida cotidiana de los habitantes de la ciudad.
A lo largo del siglo XVII, se desarrolló en torno a él una intensa actividad constructiva; más que un convento se convirtió en un conjunto religioso. Después de muchos avatares históricos, diversos usos civiles y comerciales, entre los que destaca su uso como cuartel durante conflictos armados, el 4 de diciembre de 1928 el inmueble se entregó al gobierno del estado. Un grupo de queretanos asumieron la defensa del monumento como parte de un proyecto integral por la recuperación del patrimonio histórico de Querétaro. Así, el 6 de noviembre de 1936, se hizo formal entrega del museo a su primer director, Germán Patiño.