Museo comunitario de Culhuacán: historia, cultura y memoria colectiva
En el sur de la Ciudad de México se encuentra el Antiguo Convento de San Juan Evangelista, uno de los pocos conventos agustinos que se conservan en la capital. Construido hacia la mitad del siglo XVI, se destaca por su estilo arquitectónico renacentista hecho en basalto volcánico, material abundante en la zona, así como por la pintura mural que conserva tanto en el claustro bajo como en el claustro alto.
Este histórico recinto sobresale también por ser el museo en el que se resguarda la memoria e historia de Culhuacán. Cuenta con un acervo que va desde esculturas, cerámicas, sellos o cuchillos prehispánicos hasta pinturas al óleo, pilastras barrocas o la base del púlpito que se encontraba en el templo, todos ellos de la época novohispana.
Así, el discurso museográfico enfatiza los aspectos culturales Culhuacán que han definido la conformación de su sociedad y su devenir, como el desarrollo en un medio lacustre, su importancia y permanencia como centro religioso desde los tiempos mesoamericanos, pasando por la evangelización del periodo colonial, en donde tuvo lugar el sincretismo. Además, el espacio cuenta con una biblioteca y con actividades periódicas como talleres o exposiciones que buscan acercar a la comunidad a la cultura y memoria histórica de Culhuacán.
En el marco del Día Internacional de los Museos, que se conmemora cada 18 de mayo, es esencial destacar la encomiable labor realizada por museos comunitarios, como el de Culhuacán. Estos espacios desempeñan un papel crucial al fortalecer los lazos entre la sociedad y los contextos culturales, permitiendo que las comunidades se apropien no sólo de los lugares sino también de su memoria colectiva y patrimonio cultural local, lo que contribuye a una comprensión más profunda de la historia que ha moldeado su identidad colectiva.