La Casa Azul: cosmovisión maya en un mural
El complejo maya de Calica, en Quintana Roo, destaca por su asociación entre templos y cuevas. El sitio incluía cenotes de agua dulce y salada, y su conjunto principal, conocido como Kisim o Grupo de la Estela, fue construido sobre una caverna. Entre sus edificaciones sobresale el Templo de las Columnas, que alberga en su interior el santuario llamado La Casa Azul, en cuya fachada aún se conserva una pintura mural que refleja elementos fundamentales de la cosmovisión maya.
Con un estilo característico de los sitios de la Costa Oriental, la paleta de colores predominante incluye azul, gris, blanco, ocre y negro, este último utilizado para delinear los detalles, todos aplicados con una técnica similar al fresco. De acuerdo con los estudios, las representaciones abordan temas como el agua, la fertilidad, la vida y el renacimiento y, sobre todo, el mural destaca el movimiento constante del cosmos como un eje central. Todo ello estructurado en cuatro planos: el terrestre, representado por el Inframundo; el celeste; el sagrado, simbolizado por la escena en que una deidad sale de una vasija; y un plano cosmogónico, representado por toda la mitad superior de la fachada.