Jade, conchas y poder: el ajuar funerario de Garra de Jaguar
En la antigua ciudad maya de Calakmul, Campeche, dentro de una cámara funeraria cuidadosamente decorada bajo la Estructura II, se halló el ajuar mortuorio del gobernante Yuknoom Yich’aak K’ahk’, también conocido como Garra de Jaguar. Este hallazgo, descubierto entre 1997 y 1998, fue muestra no sólo el poder de un rey, sino también la visión sagrada que los mayas tenían sobre la muerte y el renacimiento.
Dispuesto sobre una parihuela con flores, el cuerpo del k’uhul ajaw fue ataviado con collares de jadeíta y perlas, pectorales, conchas marinas y una máscara funeraria que lo identificaba con la deidad del maíz, símbolo de fertilidad y renovación. En la tumba también se hallaron orejeras inscritas, figurillas ceremoniales y un tocado elaborado con palma, jade y una garra de jaguar.
Cada objeto del ajuart tenía un sentido ritual y cosmogónico. El jade, símbolo del agua y de la vida, era considerado un material vivo. Las conchas, por su parte, conectaban con el mundo acuático y el inframundo. Todo este conjunto sagrado hablaba del estatus divino del soberano.
Esta valiosa ofrenda funeraria se resguarda para su conservación y admiración en el Museo de Arqueología Maya Fuerte de San Miguel, en Campeche, recinto que forma parte del Centro INAH Campeche, dependencia que este 2025 cumple 40 años de salvaguardar el patrimonio de esa entidad.
