Exconvento de Oxolotán: el edificio novohispano más antiguo de Tabasco
Enclavado en la majestuosa la sierra sur de Tabasco, el templo y exconvento de Santo Domingo de Guzmán se ubica en el pueblo de Oxolotán. Su construcción comenzó en el siglo XVI, alrededor del año 1572, cuando los dominicos, quienes se habían afincado en Ciudad Real (actualmente San Cristóbal de las Casas, Chiapas), llegaron a la zona para continuar con la evangelización de los grupos zoques que la habitaban. Luego el complejo conventual pasó a manos de los dominicos, quienes finalizaron su construcción y lo dedicaron al santo fundador de la orden.
Consta de una iglesia con planta de salón y ábside cuadrado, un amplio atrio rectangular al frente y un pequeño convento anexo. Para su construcción se utilizaron cantos de río y piedra muca cortada. Durante el movimiento anticlerical tabasqueño, sucedido entre las décadas de 1920 y 1930, el conjunto se salvó de ser destruido, aunque fue desmantelado y se ocupó como cuartel. En 1988, se restauró el convento, el cual se convirtió en sede del Museo de la Sierra de Oxolotán, para mostrar la arqueología e historia del lugar, así como para exponer arte sacro y recrear la vida conventual del que fue el centro evangelizador más importante de la provincia de Tabasco durante el Virreinato.