Defensa en tiempos de invasión: Batalla de Chapultepec y los Niños Héroes
Uno de los episodios más emblemáticos de la historia mexicana fue la Batalla de Chapultepec, acontecida el 13 de septiembre de 1847, durante la Invasión estadounidense. Este enfrentamiento se desarrolló en el cerro de Chapultepec, donde se encontraba el Colegio Militar, último baluarte de defensa dentro del Valle de México.
La invasión había comenzado en 1846, y para principios de 1847, las tropas del general estadounidense Winfield Scott ya habían desembarcado en Veracruz, con el objetivo de llegar a la capital. Tras victorias en Padierna, Churubusco y Molino del Rey, los invasores llegaron a Chapultepec.
El asedio comenzó el 12 de septiembre con bombardeos, y al día siguiente, más de 7 mil soldados estadounidenses sitiaron las posiciones mexicanas, que contaban con poco más de 800 defensores. Entre ellos se encontraban soldados del ejército mexicano, bajo el mando de Nicolás Bravo, y el Batallón de San Blas, liderado por Felipe Santiago Xicoténcatl. A su lado, alrededor de 50 cadetes del Colegio Militar decidieron unirse a la lucha en defensa de la soberanía nacional.
De estos jóvenes cadetes, seis fueron quedaron en la memoria histórica por su sacrificio en esta batalla: Agustín Melgar, Fernando Montes de Oca, Francisco Márquez, Juan Escutia, Vicente Suárez y Juan de la Barrera. Pese a que no fueron los únicos que perdieron la vida en aras de la soberanía, ellos se convirtieron en símbolo de la valentía y el compromiso de quienes lucharon hasta el final para defender su patria.