Altar del templo de San Francisco de México
Luego de la Conquista, los franciscanos fueron la primera orden eclesiástica en llegar a la Nueva España. Hacia 1524, comenzaron a construir en la capital del virreinato un templo y convento dedicado a su santo patrono, san Francisco de Asís. Además de funcionar como la sede de su orden, fue la construcción monástica más grande de todo el territorio novohispano.
En 1783, el altar mayor, originalmente barroco, fue reemplazado por uno de estilo neoclásico, inspirado en un alzado de Jerónimo Antonio Gil. El complejo arquitectónico fue demolido casi en su totalidad en el siglo XIX. Aunque el templo también se vio afectado, este se conserva hasta la actualidad.
Foto: Gabriela Berumen. INAH.