Alegoría de la Geología: la ciencia representada en el arte
En el plafón de la antigua Sala de Consejo del Museo de Geología de la UNAM se encuentra Alegoría de la Geología, pintura al fresco realizada hacia 1906 por Fernando Sevilla y Vicente Renau. La escena muestra a una matrona romana que porta una antorcha, elemento que simboliza la luz del conocimiento, y una esmeralda, piedra que hace alusión a la mineralogía, rama de la geología. A su alrededor, querubines presentan fósiles, minerales e instrumentos científicos, en representación del alcance de las ciencias de la Tierra.
La obra formó parte de la ornamentación original del entonces Instituto Geológico Nacional, inaugurado durante el X Congreso Geológico Internacional, en un elegante edificio porfiriano. En su composición se aprecian cráneos fósiles, conchas, formaciones minerales y libros, símbolos que remiten a disciplinas como la paleontología y la mineralogía.
Estos elementos, plasmados con minucioso detalle, evocan la labor científica de finales del siglo XIX y principios del XX, cuando la geología ofrecía nuevas herramientas para comprender la historia de la Tierra y, con ella, la de la humanidad.
