La riqueza cultural de los pueblos originarios de México tiene una gran expresión de sus cosmovisiones en las maravillosas y diversas creaciones de arte popular que realizan y en las cuales plasman también, conocimientos ancestrales: hay bordados que cuentan historias, figuras de barro que inmortalizan mitos, delicados diseños de arte plumario que conservan tradiciones milenarias y fibras naturales que entretejen leyendas. Admirar esta riqueza artesanal es reconocer el gran mosaico cultural que es nuestra nación.