La colonia Roma, así como el barrio de la Romita son lugares emblemáticos cuya importancia histórica radica en su papel como testigos de la evolución urbana de la capital mexicana. En este recorrido seremos testigos de cómo la Romita, cuyo origen se remonta a la época prehispánica, ha conservado su encanto virreinal, con estrechas calles empedradas y coloridas casas antiguas; mientras que la Roma Norte con sus amplias avenidas arboladas y elegantes edificaciones de estilo europeo se volvió emblema de la modernidad y epicentro del arte y la cultura en México.