*** Autoría del historiador Bernardo García Díaz, es una coedición del INAH y la Universidad Veracruzana
*** La obra va del inicio de este conjunto, en 1977, a su evolución hasta el año 2000; incluye retratos sobre la presencia jaranera en México y en el mundo
El Grupo Mono Blanco tuvo su origen en la capital del país hacia 1977, por iniciativa de Juan Nicanor Pascoe Pierce y los hermanos Gilberto Gutiérrez Silva y José Ángel Gutiérrez Vázquez; dicho trío comenzó a ejecutar música de la región sotaventina de Veracruz, cuyo género, décadas antes, estaba en riesgo de desaparecer. Su historia, clave en la revitalización del son jarocho, ha quedado plasmada en un libro, autoría del historiador Bernardo García Díaz.
El Renacimiento del son jarocho y el Grupo Mono Blanco (1977-2000), vol. I (2022), es una coedición de la Secretaría de Cultura federal, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y la Universidad Veracruzana, con apoyo del Gobierno del Estado de Veracruz, por medio del Instituto Veracruzano de la Cultura, el Museo de Historia de Mendoza y la Librería Mar Adentro.
Presentado en el marco del INAHfest, en Cuernavaca, Morelos, el libro registra, de manera testimonial y cronológica, el aporte significativo del Grupo Mono Blanco en la revitalización del son jarocho, así como la evolución de esta música en las últimas décadas del siglo XX; cuenta con un dosier con retratos sobre la presencia jaranera en México y en el mundo.
En los primeros capítulos relata los inicios de este conjunto y su incorporación a los circuitos culturales del Estado mexicano, así como de sus inquietudes por recuperar los fandangos comunitarios. El Grupo Mono Blanco apareció en medio de un contexto político y social en el que los mexicanos buscaban una revalorización de sus identidades.
Para el grupo fue trascendente conocer al investigador y músico Antonio García de León quien, en 1979, acercó a los integrantes con Arcadio Hidalgo, considerado el “último jaranero negro del Sotavento”, este hecho derivó en el surgimiento de un nuevo nombre al conjunto: Arcadio Hidalgo y el Grupo Mono Blanco, dando jerarquía y liderazgo al músico de Nopalapan.
Uno de los eventos relevantes que se abordan en las páginas es el “Encuentro de Jaraneros y Decimeros de Tlacotalpan”, efectuado en 1979 a iniciativa de Radio Educación, el cual ayudó a difundir el movimiento del son jarocho; al año siguiente, Mono Blanco emprendió una gira de conciertos pero, al concluir, José Ángel Gutiérrez Vázquez decidió salir del grupo, y en su lugar entró Andrés Vega, conocido como “el Güero”.
En 1980 grabaron su primer material discográfico: Sones jarochos con Arcadio Hidalgo y el Grupo Mono Blanco; de 1983 a 1986, participaron en un proyecto de revitalización del son, a través del cual se promovieron eventos con soneros y bailadoras de tarima, talleres, registros fotográficos y memorias, y en 1984 apareció su segunda producción.
Hacia 1989, se planeó la primera gira de Mono Blanco por Estados Unidos, pero ahora como un cuarteto, integrado por Andrés Alfonso, Gilberto Gutiérrez, Patricio Hidalgo y Andrés “el Güero” Vega, quienes sembraron la semilla del son fuera de nuestras fronteras, principalmente en California.
En los años noventa se integraron César Castro y Gisela Farías; a su vez, fueron producidos nuevos volúmenes de sones jarochos y materiales, como Sin tener que decir nada (1992) y El mundo se va a acabar. Grupo Mono Blanco y Stone Lips (1998), este último, con participación de instrumentistas y cantantes de Cuba, Puerto Rico, Perú, Venezuela, Nigeria, Estados Unidos y Senegal.
En 2001, Mono Blanco se constituyó como asociación civil e impulsó la Casa de la Música Popular Veracruzana, en el Centro Histórico de Veracruz, donde se imparten talleres de fandango.
El último bloque del libro, Dossier: El fandango por todas partes, reúne más de 250 fotografías que dan cuenta de cómo el son jarocho se mantiene vigente en el mundo, con agrupaciones en Estados Unidos, Canadá, Francia, Japón, Finlandia, y con festivales de fandango en la Ciudad de México, así como en las celebraciones y fiestas de sitios veracruzanos tradicionales, como Cosamaloapan, los Tuxtlas, Acayucan, El Hato y Tlacotalpan.
El Renacimiento del Son Jarocho y el Grupo Mono Blanco (1977-2000) puede adquirirse en la página de la Coordinación Nacional de Difusión del INAH.