• El altar se dedicó al ingeniero geólogo Jaime Torres Trejo, profesores, investigadores y personal que laboró en la escuela
• Los certámenes fueron los siguientes: decorado de cráneos de cerámica, cuento, calaverita literaria y disfraces
Según una leyenda maya, los dioses que crearon la tierra olvidaron inventar al ser que llevara los pensamientos y deseos de un lugar a otro; al no tener maíz ni barro, para hacerlo decidieron usar un jade y tallarlo en forma de flecha, la cual soplaron y de ella surgió, a manera de vuelo, el ‘x ts’unu’um’ o colibrí, animal admirado por el ingeniero geólogo Jaime Torres Trejo (1958-2022), a quien fue dedicada la magna ofrenda de la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía (ENCRyM), Manuel del Castillo Negrete.
El altar fue inaugurado por autoridades académicas de la ENCRyM, escuela del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), organismo de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México. Además, para celebrar el Día de Muertos, se realizaron los siguientes concursos: decorado de cráneos de cerámica, cuento, calaverita literaria y disfraces, cuya convocatoria fue abierta a la comunidad estudiantil, profesores y personal administrativo.
En el evento, el titular de la ENCRyM, Gerardo Ramos Olvera, agradeció la iniciativa de la maestra Martha Isabel Tapia González, quien cada año, junto con los alumnos del Seminario-Taller de Obra Mural, son los encargados de montar la ofrenda tradicional en la escuela; asimismo, refirió lo complicado que resultó para el jurado elegir a los ganadores de cada certamen y felicitó a los participantes por su talento, ingenio y creatividad.
Enseguida, la maestra Tapia González y la alumna Stephanie Itiel Herrera Marín explicaron a los asistentes que la ofrenda simula estar esculpida en roca y busca enaltecer el gusto que Torres Trejo tenía por las piedras, pasión que lo llevó a ser el titular del Laboratorio de Petrología de la ENCRyM, por más de 23 años.
El montaje se complementa con piezas de celofán verde que emulan jade, flores de cempasúchil que descienden como si fueran lava, fruta, sal, agua, pan, fotografías de profesores, personal que laboró en la escuela e investigadores destacados fallecidos, como Alfredo López Austin, Carlos Vázquez Olvera e Íker Larrauri Prado, un tapete con la imagen de un colibrí, figuras de papel que representan al ave y penden de un hilo, en aparente vuelo.
“Durante sus clases en línea, por motivo de la pandemia de COVID-19, el maestro Jaime Torres nos hacía la jornada más amena al mostrarnos fotografías de los colibríes que llegaban a su casa, a los cuales le ponía nombre; aquel recuerdo motivó nuestra ofrenda, misma que fue apoyada por 19 estudiantes del quinto semestre de la licenciatura en Restauración, chicos de servicio social y educativo, así como la asesoría de Luz Esparza López”, explicó Herrera Marín.
La jefa académica de la licenciatura en Restauración, Fanny Unikel Santoncini, enunció a los ganadores de los certámenes. En decorado de cráneos de cerámica, los premiados fueron Dulce Liliana Cruz Rivera, por su trabajo “Archivo muerto”, el cual representa el lugar donde deparan los documentos cuando dejan de tener utilidad; y el equipo del Seminario-Taller de Conservación de Fotografía gracias a su calavera “Cian”, adornada con la técnica del cianotipo.
El segundo lugar fue para Jessica Marcela Cruz Santinelli, con su obra “El canto de la Sirena”, que habla de un antiguo relato en el que los marineros eran atraídos por melodías de esa ninfa; y Aldo García Jiménez por su creación en cera “Que brille para ellos la luz perpetua”. El tercer lugar fue para Paola Rodríguez Morales, con su cráneo “El viaje al centro de nosotros”, inspirado en la novela de Julio Verne Viaje al centro de la Tierra; y María López Núñez, con “Historias en las calles”, sobre estética urbana en muros.
En el rubro de cuento, las triunfadoras fueron en primer lugar, Teresa Menchelli Pérez con el relato “El pan de Margarita”; en segundo, Dante Chávez Argüero por su narración “Paramnesia”; y en tercero, Esteban Mercado González con el cuento “Entre sombras y sueños”. En tanto, en calaverita literaria, el primer puesto fue para Keila Betsabé Merodio Guerrero por su texto “Concierto para celebrar: La vida y la muerte en su andar”; y, el segundo, para Meztli Romero Pichardo por su escrito “El próximo en año”.
Respecto al certamen de disfraces: Dante Chávez Argüero y Fernanda Castro García ganaron el primer lugar con su caracterización de Pinocho y Geppetto; la segunda posición fue para Jesús Villegas Alcántara, quien personificó a Willy Wonka; y el tercer puesto para Lorena Silva Ramírez, por su disfraz “Lego restaurador”. Al final hubo degustación de atole y pan de muerto.
