*** La labor está a cargo del Seminario-Taller de Restauración de Obra Moderna y Contemporánea de la ENCRyM
*** El ñero en la cultura gira en torno a la sociedad como soporte de la educación (muro norte) y la cultura del trabajo (muro sur)
Daniel Manrique Arias (1939-2010) fue un artista que con su trabajo mostró la tradición del famoso “barrio bravo” de Tepito, en la Ciudad de México; fundador del movimiento mexicano de arte contemporáneo conocido como Tepito Arte Acá, entre sus obras están el mural El ñero en la cultura, pintado hacia 1982, en el campus Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), el cual es sometido a un proceso de intervención por parte de Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Mediante un convenio de colaboración entre dicha institución universitaria y el Seminario-Taller de Restauración de Obra Moderna y Contemporánea (STROMC) de la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía (ENCRyM), se atiende dicha obra que versa sobre dos temáticas: el muro norte refiere a la sociedad como soporte de la educación, y el sur, a la cultura del trabajo.
La profesora titular del STROMC, Ana Lizeth Mata Delgado, informó que, en 2022, al mural se le realizaron pruebas de limpieza, fotografías con luz ultravioleta y toma de muestras, para conocer su estado de conservación, a partir de ello se determinó que era viable su recuperación y se presentó un proyecto ejecutivo de intervención ante la autoridad de la UAM-Xochimilco, el cual fue aprobado, y la restauración integral arrancó a inicios de 2023.
“El mural fue pintado por Manrique con pintura vinil-acrílica sobre un soporte de tablaroca, y está ubicado en una oficina administrativa que hoy lleva el nombre del artista en el edificio de Acompañamiento a las Trayectorias Académicas del Alumnado o Edificio B. Presentaba suciedad, material ajeno (cintas, cables y pelusa) e incisiones no originales en ambas secciones, así como manchas, inestabilidad del soporte y pérdida de la capa pictórica”, detalló.
Los alumnos del STROMC, bajo la supervisión de Mata Delgado, iniciaron los trabajos en ambas paredes, los cuales consistieron en la reposición de faltantes de soporte y resanes con una pasta hecha de carbonato de calcio, Beva D-8 y agua (previas pruebas); limpieza superficial de la capa pictórica y reintegración cromática, esta última, únicamente en el muro norte, con el uso de gouache.
“Debido al soporte de capas de cartón de la tablaroca, algunos procesos de restauración son similares a los que se usan en papel. Todo el mural ostenta un cromatismo donde prevalece el tono marrón y, en menor medida, colores negros, blancos, grises y ocres. Los materiales aplicados son reversibles y compatibles con la manufactura original empleada por Manrique”, acotó.
En el muro norte se aprecian 24 personajes en diferentes posturas, algunos con rostro, pero en la mayoría no es clara la definición de este; hacia el centro y en las secciones laterales hay 13 de estos personajes, quienes sostienen un pizarrón, el cual es entendido como el instrumento que transmite el conocimiento; en la parte superior, se observa una población que estudia y la firma del autor.
En tanto, en el muro sur hay ocho personajes con rostro en diferentes posiciones y actividades, un engrane que remite a la industria laboral; el retrato del filósofo y economista Karl Heinrich Marx, quien teorizó sobre la jornada de trabajo; la labor agrícola en el mundo prehispánico y, en su parte medular, dos cuerpos femeninos completos con las manos entrelazadas, cuyo significado está en proceso de estudio.
Cabe mencionar que la pintura del muro sur no fue terminada por el artista, y de acuerdo con la información proporcionada a los investigadores, quizá, se debió a la falta de materiales.
La atención del mural continuará hasta noviembre de 2023, mes en el que se prevé su entrega. El seminario-taller trabajará a la par en otra obra monumental de Daniel Manrique: la serie de 32 murales ubicados en avenida del Trabajo y calle Peñón, en la Unidad Habitacional Los Palomares, en Tepito.
Desde que empezó la restauración, a cargo de Mata Delgado, mediante el esquema de servicio social, han participado: Ana Sofía Vargas Gamboa, Yazmín Daniela Alejandra Moreira Cordero, Josh Peniche Romero, Ana Gabriela Calderón Puente, Gustavo Martínez Mendoza y Claudia Curbelo Cabrera (estadía). Para el periodo de la práctica de campo se integraron al equipo Karen Limón Torres, Catalina Martínez Le-Clercq y Jimena Sandoval Barrios, así como la profesora Rocío Mota Muñoz, adjunta del STROMC.
