• Gabriela González-Mariscal entregó el Retrato de Manuela Mesa. India cacica y monja coronada, como símbolo de agradecimiento a México
• El proceso de donación, iniciado en mayo de 2023, fue signado en la Sala de Profundis del recinto museístico
El pasado 11 de septiembre de 2023, se efectuó el acto protocolario de donación, al Museo Regional de Tlaxcala (MRT), de la pintura de caballete Retrato de Manuela Mesa, india cacica y monja coronada del Convento de la Compañía de María, de autor anónimo, la cual data de 1824.
A nombre de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y en representación del director del Centro INAH Tlaxcala, José Vicente de la Rosa Herrera, la obra fue recibida por el titular del MRT, Diego Martín Medrano, quien dio una referencia histórica de esta pieza de gran tamaño, así como de su valía, al tiempo que agradeció la generosidad de la donadora, Gabriela González-Mariscal Muriel.
Asimismo, el etnólogo refrendó el compromiso que señala la ley orgánica de la dependencia federal, respecto a la conservación, restauración, protección y recuperación del patrimonio cultural, arqueológico e histórico, y la promoción y difusión de las materias y actividades que son de su competencia.
El proceso de donación, iniciado en mayo de 2023, fue signado en la Sala de Profundis del museo, ante numerosa asistencia que reconoció el gesto de la donadora y de la familia González-Mariscal de la Torre, al hacer entrega de la pieza de alto valor estimativo.
Gabriela González-Mariscal Muriel expresó el interés de donarla desde hace 15 años, cuando lo heredó de su madre: “Para agradecerle a México las oportunidades de desarrollo que le dio a mi mamá, de que ella se educara haciendo una licenciatura, maestría y doctorado en la Universidad Nacional Autónoma de México, y luego para desarrollar su trabajo en esa casa de estudios”, dijo.
Esto, agregó, es un símbolo de gratitud a México, y expresó su gusto por hacer posible que un gran número de personas puedan ver el cuadro en un museo público, comprometido con el resguardo de la historia.
La obra contextualiza el entorno histórico y la importancia de la presencia femenina, considerando que el retrato de Manuela Mesa, india cacica y monja coronada representa a las mujeres reconocidas, tanto por los indígenas como por los españoles, con todos sus títulos y privilegios, a la par que los varones y socialmente equiparadas con la nobleza.
Dichos tópicos delinearon la investigación de la historiadora Josefina Muriel de la Torre, madre de Gabriela González-Mariscal y primera propietaria de la obra, quien fue una destacada escritora, investigadora, bibliófila y académica mexicana, especializada en la historia del mundo femenino y religioso de la Nueva España.
La investigadora del Instituto de Estudios Históricos y Culturales de la Mujer AC, Ana Rita Valero, así como la investigadora de la Universidad de Kentucky, Estados Unidos, Mónica Díaz, reflexionaron sobre la prolífica labor de la historiadora y explicaron los detalles del retrato, el cual ejemplifica, hacia 1526, la costumbre que tenían los caciques para con las hijas, de educarlas desde niñas en los colegios por maestras españolas.
Asimismo, la pintura pondera los derechos reconocidos hacia la mujer durante el virreinato. Los indígenas las consideraban como una joya de gran valor, y los conquistadores reconocieron su importancia como autoridades intermedias.
Este legado queda bajo custodia del Museo Regional de Tlaxcala, el cual resguarda la historia prehispánica y virreinal del estado. La obra, indicó el titular del recinto museístico, Diego Martín Medrano, será debidamente atendida en el área de restauración, cuyo proceso iniciará con una fumigación especializada, con miras de que pueda exhibirse en el segundo bimestre de 2024, en la Sala de Historia y Religiosidad.
El titular de la Secretaría de Cultura de Tlaxcala, Antonio Martínez Velázquez, acudió con la representación de la gobernadora del estado, Lorena Cuéllar Cisneros; así como Lorenza González-Mariscal y la señora Patricia Terán, quien resguardó el cuadro por algún tiempo en Panotla, Tlaxcala.