• El INAH atendió el aviso y, luego de gestionar el seguro correspondiente, supervisó los trabajos para recuperar el patrimonio afectado
• Se intervinieron la talla policromada, su base tipo peana y el piso de madera
Bajo supervisión de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), concluyeron las acciones de resarcimiento de daños de tres bienes muebles históricos de la iglesia de San Juan Bautista, en la localidad de Coxcatlán, municipio de Buenavista de Cuellar, Guerrero, dañadas por un incendio en octubre de 2022.
Se trata de una escultura de San Miguel Arcángel, hecha en madera policromada, su base tipo peana y el piso contiguo de madera. La imagen data de finales del siglo XVIII y forma parte del acervo iconográfico de dicha edificación de origen franciscano, con etapas constructivas del siglo XVI, cuando era una capilla abierta, hasta el siglo XVIII, momento en el que se construyeron la nave principal y la torre campanario.
Cabe recordar que el 24 de octubre de 2022, los encargados del templo, Jesús Torralva Román, Analilia López Montalbán y Juan Aranda Flores, junto con el presbítero Gregorio Barrera Roldán notificaron, vía oficio, al Centro INAH Guerrero, que días antes había ocurrido un incendio, al parecer provocado por las veladoras que quedaron prendidas en la repisa de la imagen de San Miguel Arcángel, dañándose la talla, su vestimenta y parte del piso de madera.
En atención al aviso, el Área de Conservación del Centro INAH Guerrero realizó las inspecciones correspondientes para verificar y dictaminar el estado de conservación de los bienes muebles afectados.
Producto del siniestro, la obra presentaba efectos de deterioro, como ampollas en la capa pictórica, escurrimientos y material plástico sobre la superficie, faltantes de base de preparación y capa pictórica, presencia de hollín y oscurecimiento de la capa pictórica, así como grietas y fisuras. Mientras que en el piso de madera y el muro contiguo hubo deterioros, como oscurecimiento, deposición de hollín, ampollas, fisuras, carbonización, entre otros.
Se integró un proyecto de intervención, autorizado por el INAH, para la ejecución de los trabajos, con recursos del Aseguramiento de Bienes Culturales, contratado por el instituto para casos de desastres. Cabe mencionar que la escultura había recibido tratamientos de conservación y restauración, bajo la coordinación del restaurador Gustavo Rivera Zamora, entonces adscrito al Centro INAH Guerrero; la documentación y el registro recuperado en aquel momento fue indispensable para retomar la información del estado de conservación de la obra antes del siniestro y así realizar las gestiones correspondientes ante la aseguradora.
El proyecto de recuperación fue desarrollado por profesionistas en materia de conservación de bienes muebles, quienes, entre mayo y septiembre de 2023, realizaron las acciones necesarias para el resarcimiento de los daños provocados por el incendio en los bienes muebles y asociados al inmueble.
Estas acciones estuvieron a cargo de la restauradora Denise Charua Ayala, bajo la supervisión del Área de Conservación y Restauración del Centro INAH Guerrero, a través de la restauradora Ana Elena Vivas Moreno, quien explica que a la escultura afectada se le realizaron labores de limpieza, eliminación de estratos dañados por el siniestro, fijado y consolidación de los mismos, unión de fragmentos, resane, reintegración cromática y la reposición de capa pictórica, únicamente en las encarnaciones.
En tanto, a la base tipo peana se le eliminaron agregados posteriores a su hechura original, así como limpieza, estabilización de estratos, resane y encalado. Al piso se le retiraron las secciones dañadas por el fuego, se niveló, se repusieron tablones en cedro, de similar calidad, se le aplicó material ignífugo y se realizó la integración cromática.
Una vez concluidas estas acciones, el 18 de septiembre de 2023, se hizo la entrega formal de los bienes restaurados. Además de presentar los trabajos realizados, Denise Charua y personal del Centro INAH Guerrero explicaron las medidas preventivas de conservación y dieron recomendaciones para el movimiento de los bienes muebles; la pieza fue entregada junto con el informe técnico de intervención.
Las autoridades y sociedad civil manifestaron su agradecimiento al INAH por la profesionalidad de los trabajos y porque la escultura de San Miguel Arcángel regresó a tiempo para la festividad en su honor, la cual se realiza cada 29 de septiembre.