Con el Promeza, avanza la investigación y puesta en valor de la Zona Arqueológica de Oxkintok, en Yucatán

Derivado del compromiso social del Gobierno de México, en el país se conducen numerosas transformaciones tanto en el aire como en tierra y en el subsuelo, en cuyo último caso se recupera el esplendor de las poblaciones mayas prehispánicas y actuales, a través de las acciones desarrolladas por la Secretaría de Cultura federal, mediante el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Así lo comentó el director general del INAH, Diego Prieto Hernández, al participar en la conferencia matutina del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y encomiar el anuncio del primer mandatario respecto a la adquisición oficial de la empresa Mexicana de Aviación.

“Quisiera saludar el hecho de que esta nueva aerolínea del Estado mexicano tendrá su sede en la ex Hacienda de Santa Lucía, un monumento de gran valía para entender el desarrollo histórico de la Cuenca de México, la cual fue protegida y restaurada por el INAH durante las obras de construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles”.

Posteriormente, el antropólogo brindó una síntesis de los avances en las tareas realizadas por el instituto en el marco del proyecto prioritario Tren Maya, “una investigación sin parangón en la historia de México”, la cual está dividida en dos partes: por un lado, los trabajos de salvamento arqueológico en los 1,554 kilómetros de vías y sus obras adyacentes –estaciones, talleres o depósitos de combustible, entre otras–; y por otro, la puesta en valor de 27 sitios que forman parte del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza).

Respecto al salvamento arqueológico general en las obras del Tren Maya, Prieto Hernández informó que, al corte del 9 de agosto de 2023, se han registrado y preservado 53,649 bienes inmuebles (basamentos piramidales, unidades habitacionales, caminos o cimientos antiguos); 1,219,464 fragmentos de cerámica; 1,925 elementos de tipo mueble (metates, figurillas u otros instrumentos domésticos); 853 vasijas, las cuales están en proceso de restauración; 646 osamentas humanas y 2,252 rasgos naturales asociados a la presencia de grupos humanos.

En cuanto a la ejecución del Promeza, el titular del INAH presentó un video sobre los avances de este programa en la Zona Arqueológica de Oxkintok, en Yucatán.

Dicho enclave prehispánico, cuyo nombre en maya significa ‘tres días pedernal’ o ‘tres soles afilados’, es una de las ciudades poco conocidas que forman parte de la ruta Puuc, ubicada al norte de Campeche y en la porción suroeste de Yucatán.

Oxkintok alcanzó su apogeo comercial y su influencia a nivel regional durante el periodo Clásico maya (200-950 d.C.), época a la que están ligadas la mayoría de sus estructuras, las cuales están distribuidas en 39 grupos arquitectónicos, descubiertos hasta la fecha.

Durante ese esplendor gobernó uno de sus principales jerarcas, denominado Walas, quien ejerció el poder de la ciudad en la primera mitad del siglo VIII, y mantuvo, de acuerdo con inscripciones jeroglíficas, una fuerte centralización del mando político.

Uno de los objetivos del Promeza es visibilizar y proyectar esta zona arqueológica a nivel internacional, indicó el titular del INAH, al detallar que para ello se ha fortalecido la investigación de sus tres principales grupos arquitectónicos, denominados Canul, May y Dzib; a la par que se crean 124 cédulas explicativas, en español, maya e inglés, las cuales se desplegarán en 1,094 metros lineales de senderos interpretativos, con lo que además se ampliará el circuito de visita actual.

Por último, el antropólogo dijo que, además, se trabaja en la construcción de una nueva unidad de servicios para las y los visitantes de Oxkintok, donde, al día de hoy, se reporta un avance de 25 por ciento.