Page 21 - Agenda Cultural Septiembre 2022
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San Antonio
Padua
de
Gracias a la labor conjunta entre
autoridades mexicanas y estadounidenses,
tras 20 años de búsqueda, se logró la
repatriación de la escultura policromada
virreinal, la cual fue sustraída ilegalmente
de la parroquia de Santiago Apóstol,
Jiutepec, Morelos en 2002.
La pieza se encontraba en posesión de un
coleccionista estadounidense, quien, al morir,
heredó su acervo a un museo dalasita. Tras
percatarse de que la escultura no contaba
con los debidos papeles de autentificación,
el personal del recinto denunció el caso al FBI,
instancia que se encargó de la logística para
su devolución. Actualmente, se encuentra
bajo resguardo del INAH.
La escultura policromada y estofada, de 1.10
metros de alto por 50 de ancho y 60 de profundidad,
con elementos característicos de haber sido elaborada
en el siglo XVII, representa a San Antonio de Padua.
Posee un tratamiento en el pelo, aplicaciones de oro
en un fondo oscuro (que resalta sus diseños florales y
fitomorfos) y cuenta con un hábito tallado en madera.
Respecto a los elementos iconográficos de la obra,
destaca la tonsura —círculo rasurado en la coronilla—
de la talla, el hábito con un cíngulo o cordón con borlas
en los extremos, tanto textil como tallado sobre el
ropaje. En su mano izquierda lleva una biblia y calza
unas sandalias representativas de la devoción a la grey
religiosa.
Esta acción abona a los esfuerzos realizados
Fotografías: Centro INAH Quintana Roo
para el combate al tráfico ilícito de bienes culturales
y para la repatriación de piezas que son
patrimonio nacional y que se encuentran
de manera ilegal en el extranjero.
#MiPatrimonioNoSeVende
Conoce más sobre esta pieza
y su historia aquí.
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Fotografía: Mauricio Marat / INAH
