Es una magna obra con 443 años de antigüedad y ejemplo sobresaliente del desarrollo de los sistemas hidráulicos en América.
El acueducto fue erigido en 1554 y 1571 (17 años) por 40 comunidades indígenas dirigidas por el fraile franciscano español Francisco de Tembleque (originario del poblado de Tembleque, en Toledo, España) acompañado de Juan de Agüeros. La obra posibilitó llevar agua a pequeñas poblaciones del yermo Altiplano mexicano, ubicadas en los actuales estados de Hidalgo y de México.
El Acueducto del Padre Tembleque fue inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) el 5 de julio de 2015